lunes, 22 de agosto de 2016

Donde el Corazón te lleve


                                                     Foto de LACS      


 "Vienen a ti". O eso me dijeron una vez. "Tú les atraes como la luz a las polillas". ¡Qué imagen poética tan halagadora (¿?) para mí y tan poco justa para otros!. Hoy, una joven veterinaria que examinaba el ala rota de la paloma -¿o era la mía?- ha desvelado el misterio. "¡No te creas...se cruzan con todos!. Pero solo algunos tienen ojos para ver". Ojos para ver lo enfermo, lo roto, lo que se encuentra perdido. ¿O quizás sea yo la enferma, la rota, la que se encuentra perdida?.

 El tránsito no fue fácil. De hecho, me sacaron a empujones. Tiraron de mí con una garra de hierro. Creo que fue premonitorio. Durante años me hicieron pruebas para aseverar "mi normalidad". Aún conservo la imagen de mi cabeza llena de cables y electrodos -uno de los pocos recuerdos que guardo de mi primera infancia-. Miro mis fotos de niña y en muchas me veo seria o llorando y me pregunto...¿por qué llorabas tanto pequeña?.

 Una vez escribiste "el paisaje reflejado no es el mismo que el que yace bajo la superficie del agua", pensaba mientras compraba mis gafas de color

 rosa.


 pd. dedicado a "esa niña" que tantas veces -acertada o equivocadamente- canceló su luz para que otros 
       brillasen.



 RSB