sábado, 24 de octubre de 2015

Lo que llamamos Pasado





 Hay personas a quienes no les gusta "mirar atrás". Creen que es algo inútil, una pérdida de tiempo, un error. Viven en una linea recta en la que solo existe el horizonte. Ni tan siquiera una insinuación de presente (**)...tan solo el horizonte. Suelen ser -no siempre- aquell@s que sufrieron y/o infligieron algún daño los que prefieren...olvidar (*)...empezar de cero...hacer como si no hubiese pasado nada; como si eso, a estas alturas, fuese posible para alguno de los que habitamos este planeta, dimensión, momento en el tiempo o
...llámalo X.

 Mi pasado me trae paz. El pasado me llena de fuerza y reconocimiento. Es como cuando caminas por un sendero duro y pedregoso y te detienes, te sientas a respirar, y observas el largo camino recorrido. Cada piedra, cada hierba, cada pájaro, cada tropiezo, cada caída...habla de tus pasos...habla
de ti. Y entonces, te incorporas, y vuelves a sentir la sangre recorrer con fuerza tus arterias y venas y vuelves a impulsarte desde ti.

 Tú estás en el centro mientras peregrinas alrededor de ti.


 Un fragmento de mi pasado...mi presente...mi futuro:

 La historia nunca recuerda a los que aman y, si es así, sus acciones son tergiversadas y malinterpretadas por aquellos corazones que aún no están preparados para Ser Amor.

 El Amor no es "una apacible puesta de sol", ni es "un tranquilo paseo por el bosque", ni "dos enamorados besándose". Amor no es poder, no es sabiduría, no tiene una razón de ser. Amor es una fuerza mucho más devastadora que cualquier fuerza de la naturaleza que arrasa con lo que 
no es, pone en evidencia mentiras y falsas seguridades, vulnerabiliza y permite que se manifieste la verdadera esencia de todo aquello que es tocado por El.

 El Amor vive a la intemperie...y cuando entra en tu vida...ya nada vuelve a ser igual.


                       Blog LAS GEMELAS FRANCIS. 17-Enero-2013




 (*) o recordar desde el dolor...que es otra forma de olvido.
(**) Presente es silencio. Vacío. Es fuente de Vida.



 RSB


 

               La violencia del tiempo desgarra el Alma; 
               por el desgarramiento entra la eternidad. 

                                     Simone Weil