Vuelve, mujer, a tu locura
Vuelve, mujer,
sólo esta noche,
a tu locura,
porque nada más allí verás
la verdad de los sucesos
y la verdadera entraña de la vida,
solo allí
nacerán tus hijos azules,
tantos como quieras,
e irán amantándose de la Luna,
y volarás con las pequeñas enanas
subidas en trapecios,
descalzas y blancas,
que saltan y saltan,
y sólo allí,
y junto a ti,
habrá mujeres cambiándose la piel como reptiles,
desnudas en los bosques,
riendo al son del aire y del agua,
soñadoras y difusas,
enredadas de placer sobre largos lagartos.
Mujer, vuelve,
sólo esta noche,
un rato,
a tu locura.
Princesa Inca
-Cristina Martín-
No es fácil ser mujer en un mundo invadido de estructuras de hombres; en un mundo de humanos regidos por necesidades e intereses...según el hombre. Preservar -en sí mismo- lo verde...lo húmedo...no, no es fácil.
Tan sólo la locura, en ocasiones, nos redime y nos salva.
¿Cómo expresarnos desde el Alma cuando nuestros cuerpos aún no conocen de la diferencia?.
¿Cómo puede el hombre (*) vivir en el regazo de la divinidad, cuando la divinidad sólo atiende a una de sus mitades? - C.G.JUNG
Es en la Naturaleza donde la mujer encuentra la aceptación incondicional de lo que ella es. Quizás un día, no muy lejano, tanto lo divino en el hombre como la mujer invadida de hombre...apre-hen-dan de Ella.
(*) Ser humano
RSB